24 de abril de 2025

Vecinos de localidades como Valle Hermoso, La Falda, Huerta Grande y Villa Giardino atraviesan una alarmante situación sanitaria: el servicio de cirugías en el Hospital Municipal de La Falda –el único centro con quirófano en la región– fue suspendido indefinidamente.

La medida se debe a que la Municipalidad de La Falda no pudo cumplir con los términos del convenio firmado con la Asociación de Anestesistas, el cual no permite ningún tipo de retraso en los pagos. Como consecuencia, el hospital se quedó sin anestesista disponible y se vio obligado a interrumpir todas las intervenciones quirúrgicas.

La situación se torna especialmente crítica para mujeres embarazadas, quienes no cuentan con recursos económicos para pagar una operación de parto en el ámbito privado, ni para viajar a hospitales en la ciudad de Córdoba. El único centro alternativo, el Hospital Domingo Funes, está ubicado a más de 35 km y un viaje de urgencia en remis puede costar hasta $60.000 pesos, monto inalcanzable para la mayoría de las familias.

Desde la Municipalidad de La Falda se informó que, por el momento, cada municipio será responsable de garantizar el traslado de los pacientes que requieran cirugía, una medida que generó aún más preocupación entre los vecinos. Denuncian que muchas localidades no cuentan con ambulancias ni unidades de traslado adecuadas, y que el Hospital Funes está colapsado, operando con un solo anestesista y solo atendiendo urgencias no programadas.

Nos mandan a un hospital colapsado sin medios para llegar. ¿Qué hacemos mientras tanto si hay una urgencia? ¿Esperamos que alguien se muera?”, expresó una vecina de Huerta Grande.

La Municipalidad anunció “próximas reuniones con los directivos del hospital”, pero la incertidumbre crece. Los vecinos exigen respuestas concretas y soluciones inmediatas. Consideran que esta situación evidencia un estado de abandono sanitario, donde las decisiones políticas no contemplan la realidad ni la urgencia de los habitantes del valle.

Mientras tanto, cientos de familias viven con miedo e impotencia, sabiendo que ante una emergencia, no tienen a dónde acudir.