24 de abril de 2025

Villa Giardino, Córdoba. Vecinos de distintos barrios de la localidad manifestaron su creciente preocupación ante la circulación reiterada de motocicletas con caños de escape libre a alta velocidad, especialmente durante la madrugada y las primeras horas de la mañana. Aseguran que el problema no es nuevo, pero que en los últimos meses la situación se ha agravado frente a la total inacción de las autoridades locales.

Los testimonios se repiten con características similares: motos sin control que recorren las calles de los barrios Molino de Thea, Independencia y Vertientes de Thea, reuniones ruidosas en domicilios particulares y la imposibilidad de descansar por el estruendo generado. Vecinos aseguran haber realizado llamados a la Policía y a la Guardia Urbana, sin obtener resultados concretos.

Desde temprano en la madrugada hasta altas horas de la mañana, se escuchan motos a toda velocidad, sin caño de escape. Se reúnen a hacer fiestas en la calle Manzano, y cuando uno llama a la Policía, ya están dentro del domicilio. Esperan a que se vayan para volver a salir. Es evidente que conocen cómo funciona el sistema y lo aprovechan para seguir perturbando la tranquilidad del barrio”, relató Cristian, un vecino de la zona.

Según los denunciantes, muchos de los jóvenes involucrados provendrían de la vecina localidad de La Cumbre, donde las autoridades realizan controles más estrictos. “En La Cumbre y en La Falda se aplican controles, se labran multas y se secuestran vehículos. Aquí, por falta de decisión política, no se hace nada. Y mientras tanto, se pierde una oportunidad para recaudar y reforzar el presupuesto municipal. Luego se afirma que no hay fondos, pero no se actúa sobre lo evidente”, agregó.

La problemática también tiene implicancias en la salud de algunos vecinos. En Barrio Independencia, una madre denunció que su hijo con discapacidad sufre crisis severas ante los estruendos provocados por las motos. “Ya en la Municipalidad saben quiénes son los responsables. Tienen nombre y apellido. Pero desde Inspección General no se toman medidas. Se repite la historia una y otra vez, con consecuencias cada vez más graves”, sostuvo.

A este reclamo se suma una nota elevada hace más de un año al Concejo Deliberante por vecinos del mismo barrio, donde se solicitaban controles y presencia efectiva de fuerzas de seguridad. “Nos reunimos con concejales, con el comisario y con el director de Seguridad. Se nos prometió una solución, pero todo quedó en palabras. Mientras tanto, en otras localidades los operativos son constantes. Acá no pueden controlar ni a tres o cuatro motociclistas”, indicó Lidia, otra vecina de la zona afectada por la problemática..

La situación no se limita únicamente a los ruidos de las motocicletas. En la zona de Vertientes de Thea, los vecinos también denuncian la presencia habitual de caballos sueltos que ingresan a lotes privados, generando riesgos tanto para el tránsito como para la integridad de los animales.

El malestar social crece y muchos vecinos comienzan a exigir respuestas concretas por parte del Ejecutivo municipal. “Gobernar no es pensar en la reelección, es tomar decisiones. Si no se actúa ahora, las consecuencias pueden ser mayores”, sentenció una vecina.

Hasta el momento, desde el municipio no se han emitido comunicados oficiales respecto a estos reclamos.