En medio de la creciente tensión social y la crisis sanitaria que atraviesan los vecinos del Valle de Punilla, un jubilado quebrado al borde de las lágrimas tomó la palabra durante la sesión del Concejo Deliberante de La Falda y dejó un mensaje que conmovió a todos los presentes.
Vecinos de La Falda, Huerta Grande, Villa Giardino y otras localidades se autoconvocaron para reclamar por la falta de cirugías en el hospital municipal, la deuda con los bomberos, la inseguridad, y el abandono a los jubilados. En ese contexto, uno de ellos alzó su voz en nombre de todos:
“Como jubilado me quitaron todos los remedios. Y ahora nos tocan la salud pública en el hospital. Si siguen con estas políticas esto se va a caer. Están sosteniendo un modelo insostenible. ¡Nos están matando! ¿O quieren una guerra civil?”
El silencio del recinto se rompió con aplausos cuando continuó, con palabras directas y profundas:
“Piensen en la gente, tengan principios, háganlo por nosotros, por quienes los votamos. Los elegimos y los pusimos donde están. Por favor convoquen a los vecinos a audiencias públicas, dígannos las cosas de frente, no nos mientan más. ¡No estamos dispuestos a seguir soportando!”
“Nos hemos convocado porque nos unimos como vecinos para defender nuestros derechos. ¿Dónde está el señor intendente? ¿Por qué no está acá dando la cara?”
“¡Basta! ¿Qué hay atrás de toda esta política? Nos dicen que no hay plata, pero para espectáculos sí hay. No tienen ideas para nada. ¡Consulten con los vecinos! ¡Dénnos espacio! Ustedes parecen un feudo y nosotros sus esclavos. Vamos a estar firmes acá, y vamos a venir mil veces si hace falta.”
El fuerte discurso fue recibido con una ovación. Al finalizar, los vecinos hicieron entrega de una nota con firmas recolectadas por los presentes, exigiendo audiencias públicas, respuestas urgentes y participación ciudadana real en las decisiones municipales.
En contraste, el intendente no estuvo presente en la sesión, lo cual fue duramente cuestionado por la comunidad.
El mensaje fue claro: el pueblo de Punilla está despertando y no piensa callarse más.
